Umm! que postre tan delicioso, y pensar que antes no me gustaba...
Es un postre muy tradicional y fácil de hacer, el secreto para hacer un buen arroz con leche es hacerlo sin prisas y muy despacio, además de moverlo casi continuamente.
Hay diferentes gustos, pero a mí como podéis ver en la foto me gusta que el arroz quede un poco suelto. Se puede comer templado o fresquito, dependiendo de la estación en la que estemos te apetecerá de una forma u otra.
INGREDIENTES:
- 1 taza de arroz
- piel de limón
- 1 rama de canela
- 250 grs. de azúcar
- 2 L. de leche
PREPARACIÓN:
Poner a hervir el arroz en la perola con una taza de agua. Una vez haya desaparecido el agua incorporar la leche con la rama de canela y la piel de limón. Hervir a fuego muy lento durante al menos 35 minutos, moviéndolo casi continuamente con una cuchara de madera.
Apartar del fuego y retirar la piel del limón. Añadir el azúcar y remover hasta que quede bien integrada.
Tapar y dejar reposar unas horas.
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