El postre que os propongo hoy tiene un ligero sabor a limón, con una textura agradable al paladar, tipo a la quesada.
La encontré en el blog de Kanela y limón, que os aconsejo que le echéis un vistazo, merece la pena.
En cuanto al grosor dependerá del tamaño del molde que utilices, yo he usado uno rectangular de 25x35 y el grosor del pastel ha sido de dos cm. Así que si utilizas un molde más pequeño, el pastel será mucho más gordo.
De todas formas está muy rico, a mis hijos les ha encantado. Así que ya sabes, a probarlo.
INGREDIENTES:
- 500 grs. azúcar
- 300 grs. harina de repostería
- 6 huevos
- 60 grs. mantequilla derretida
- 1 l. de leche
- la piel de un limón
- una pizca de sal
PREPARACIÓN:
Ponemos a hervir la leche con la piel del limón. Mientras vamos preparando en un bol, la harina con el azúcar y los huevos. Cuando lo tengamos mezclado incorporamos la mantequilla y al final añadimos la leche pasándola por el colador, volviendo a mezclar suavemente los ingredientes.
A la vez que vamos prepapando la masa, encender el horno con aire arriba y abajo, a 180º unos 45 minutos aproximadamente.
Si se desea desmoldar habrá que esperar a que el pastel esté frio.
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